Aquí está el relato de Víctor sobre cómo conoció a Joe y lo trajo al Equipo Tripak:

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"Estaba en una zona rural del norte de Georgia trabajando en otro proyecto poco después de empezar a trabajar con Tripak para ayudar en la comercialización. Me detuve en un pequeño edificio un poco alejado de los caminos trillados y había dos o tres pequeñas empresas en el Di la vuelta a la parte trasera y entré por una puerta y me presentaron a Joe Burris.

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Me senté y, como siempre hago, miré alrededor de la oficina para ver qué había en la pared o en las mesas. Me sorprendió ver un estante completamente cubierto de trofeos de carreras. Obviamente, alguien estaba teniendo un buen éxito en alguna parte de las carreras, así que le pregunté a Joe al respecto. Joe me dijo que era piloto en una serie de carreras de ruta y que sí, estaba teniendo mucho éxito. También me dijo que había una historia que acompañaba su éxito.

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Todo esto tiene lugar cerca de Gainesville, Georgia, que está justo al final de la calle del Atlanta Motor Speedway. Había visto la pista que también está cerca de donde vivía en ese momento. Joe dijo que le gustaba mucho estar en las carreras y que tenía un auto propio que era bastante rápido, pero como tenía treinta y tantos años, era solo un sueño. Su esposa lo sorprendió con un regalo de un programa de carreras para Speedway que incluía lecciones y luego, al final, la capacidad de estar realmente en una carrera.

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Joe transmitió lo emocionado que estaba con el regalo y lo mucho que disfrutó de las lecciones, pero el día de la carrera fue un aguacero. Sin inmutarse, Joe salió y comenzó. Dijo que en realidad lo hace bien bajo la lluvia y parece encajar bien con su estilo de carrera. Al final de una carrera, un caballero se acercó y comentó que Joe había dado algunas vueltas buenas y luego preguntó para qué equipo competía. Joe respondió que no estaba en un equipo y que esta era su primera carrera.

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Con eso, el caballero respondió que Joe debería ir con él y conocer a algunas personas. Lo siguiente que sabes es que Joe está en un equipo de carreras y en camino.

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Fue una historia muy divertida, y comencé a contarle a Joe sobre Tripak y la idea de que podría ser algo con lo que él y su equipo podrían hacer algunas pruebas. Estuvo de acuerdo y le dejé una variedad de productos para probar. Me mantuve en contacto con Joe y de vez en cuando hablamos sobre sus carreras y el progreso de Tripak. Entonces Joe me llamó y me preguntó si me gustaría participar en una carrera. No tenía idea de qué estaba hablando, pero me explicó que Atlanta Motor Speedway tenía algo llamado Track It, Track Days. Podría viajar con él en una carrera real en la pista Speedway.

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Dije que estaba totalmente metido en la aventura y lo conocí en la pista. Tuve que firmar un descargo de responsabilidad, por supuesto, diciendo que si me lesionaba o moría en la carrera, ni Joe ni la pista serían responsables, pero después de eso comenzamos. Primero hice una ronda de desfile en su tranvía junto con muchas otras personas que solo querían estar en la pista para ver cómo era. Luego esperamos a que llegara nuestra carrera.

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Después de unos treinta minutos en boxes hablando con el equipo y mirando alrededor, Joe dijo que ya era hora y me preguntó si estaba listo. Respondí que, dado que no estaba usando pañales, tal vez quisiera hacer un viaje rápido al port-a-pot cercano solo para estar seguro. Solo estaba bromeando y estaba muy emocionado de estar en la carrera.

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Empezamos y fue una verdadera carrera. Conduje rápido y pasé años en una carrera de motocross con amigos llevando nuestras máquinas al límite, pero eso no me preparó para esto. Hicimos turnos a los ochenta que yo no intentaría a los cincuenta. Pasamos autos mucho más rápidos y nos colocamos detrás de los vehículos tan rápido que estuve a punto de hacer un agujero en el piso. Joe seguía mirándome y preguntándome si estaba bien y yo siempre respondía o le daba un pulgar hacia arriba. Cuando me volvió a preguntar, respondí que puedes saber si estoy bien y si estoy disfrutando de lo que estoy haciendo si estoy sonriendo. Le dije que no había dejado de sonreír desde que empezamos. Fue una gran experiencia y me estoy preparando para la próxima carrera en un coche mucho más rápido".